Estamos, algunos, de vacaciones. Y queda poco tiempo para pensar o escribir. Entre dormir, comer y no hacer nada, apenas queda tiempo para otra cosa. No es cuestión de robarle horas ni al sueño, ni al hambre ni a la desgana. Ni a los vinos, imprescindibles cuando uno está relajado en el corazón de la Rioja Alavesa.
El cordón umbilical con la realidad es, durante este tiempo, el iPhone. Cada vez tengo menos dudas, si es que me quedaba alguna. En estos cacharritos vamos a hacerlo casi todo en el futuro muy próximo. En el iPhone (vía wi-fi, el 3G sólo para emergencias) leo los correos, y miro Facebook y Twitter, y consulto el As y El País, y oigo la SER esté donde esté, y hago las fotos imprescindibles, y oigo música, y controlo los radares que no controlo, y me entero del tiempo que va a hacer mañana, y hasta me ilumina el camino a la cama en la casa oscura. Mi último descubrimiento se llama Wattpad, la app-lector de libros de la que se autodefine "la comunidad ebook más popular del mundo". Hay mucho para leer. Y de forma muy cómoda. Y, claro, gratis.
No hay comentarios:
Publicar un comentario